<p style="text-align:center">Una historia llena de aventuras, donde los cambios de comportamiento debido a la adolescencia te harán pensar que estás loco.</b></p>
"Una parte de mi es tipo zen, tranquila y comprensiva, pero la otra parte es un monstruo peludo que si se enfurece no hay modo de controlar, haz de cuenta como el doctor Jekyll y máster Hyde. Una vez le pregunté a la orientadora de la prepa si eso era personalidad dividida o esquizofrenia, y me dijo que no, que era una combinación de mal genio, impulsividad y hormona adolescente, y me mando a disculparme con la maestra de …
<p style="text-align:center">Una historia llena de aventuras, donde los cambios de comportamiento debido a la adolescencia te harán pensar que estás loco.</b></p>
"Una parte de mi es tipo zen, tranquila y comprensiva, pero la otra parte es un monstruo peludo que si se enfurece no hay modo de controlar, haz de cuenta como el doctor Jekyll y máster Hyde. Una vez le pregunté a la orientadora de la prepa si eso era personalidad dividida o esquizofrenia, y me dijo que no, que era una combinación de mal genio, impulsividad y hormona adolescente, y me mando a disculparme con la maestra de historia a la que Isa-Hyde le había contestado feo".
Isabel ya está cansada de cambiar de escuela a cada rato. No es que la expulsen, sino que el trabajo de su padre los obliga a mudarse de ciudad con demasiada frecuencia. Está acostumbrada a ser la freak del salón y a que le pongan apodos ñoños (como Chilanguita Satánica) solo porque se viste de negro y le gusta discutir por el puro gusto de discutir.
A los amigos los prefiere en la red que en la vida análoga, como Ro T, al que conoció en una red social a la que sube las fotos que toma con su smartphone. Un día sus padres le dicen que ahora si podrá quedarse unos años en un mismo sitio. Eso la lleva a su Ciudad de México natal y a casa... ¡de sus abuelos! Entonces la vida de Izzy da varios giros argumentales, no todos ellos para mal.
